Bonita ruta de senderismo por la Comarca del Noroeste de la Región de Murcia, mas concretamente en Moratalla.
Comenzamos la ruta en la Puerta de Somogil, angosto desfiladero formado por una falla, donde discurre el rió Alhárabe por el estrecho del calar del fresno.
Cortijo de Somogil.
Una vez sobrepasado el cortijo, tomamos una pista a la derecha.
700 metros mas adelante, nos encontramos los Baños de Somogil, donde la gente solía venir a tomar baños termales para la cura de afecciones cutáneas y reumáticas.
Las aguas subterráneas templadas, confinadas en un acuífero calizo profundo, ascienden a 24ºC desde el interior de la tierra por la escasa abertura que les ha dejado una falla del terreno.
Continuamos por el camino que mas adelante se convertirá en senda y transitara por el barranco del Rió Hondares. A veces tenemos que cruzar de un lado a otro, saltando de piedra en piedra.
A menudo, vamos viendo pozas que el agua ha ido labrando en la piedra caliza.
Llegado un punto, salimos del barranco y vamos ascendiendo por una pista muy pedregosa.
Pasamos frente al puntal del Tío y del Fraile con su"dedo" señalando al cielo, bajo este, existe una mina de cobre abandonada.
El sendero baja otra vez hasta el cauce del rió, separándose un poco para llegar a las inmediaciones de una inmensa carrasca centenaria.
Cascada Río Hondares.
Cortijo de Hondares de Abajo.
Molata de Charán.
Cortijo de Las Lomas.
Llegando a este enorme árbol caído con las raíces al aire, estamos en lo mas alto de la ruta, comenzando aquí el descenso hasta la Puerta de Somogil.
Ya se divisa al fondo la Puerta de Somogil, pero aun nos quedan por delante unos 4 kilómetros.
Ultimo paso delicado antes de llegar a nuestro destino.
El perfil de la ruta.
Al finalizar la ruta, comimos en el restaurante El Olivar de Moratalla, en donde disfrutamos de unos platos bien elaborados con aceite de oliva virgen extra. Tienen la Q de calidad y el sello de excelencia europea en calidad (EFQM).
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